*Moradores denuncian que individuo viene vendiendo parcelas del humilde cementerio del poblado.
La Comunidad Nativa San Antonio de Picuro Yacu, está ubicada en el Km 6.5 de la carretera Bellavista – Mazán. Motos lineales y motocarros se pueden tomar al final del Puente Nanay y luego de unos 40 minutos llegar al punto exacto.
La carretera, luego de una lluvia, se muestra desastrosa por la greda que hace patinar a los vehículos. En días de sol intenso, la vía se muestra mejor, firme.
Dicha vía hace unos dos meses se puso “de moda”, debido a que la gerencia de transportes y comunicaciones a cargo del Arq. Daniel Suárez; dio a conocer el contrato de mejoramiento de la carretera en la que se gastará 12 millones de soles. Se trata de la construcción del mejoramiento de la vía vecinal Picuro Yacu-Unión Centro Fuerte-Puerto Gengen-Río Momón, distrito de Punchana.
Este medio de comunicación pudo llegar el día de ayer hasta el punto exacto de Picuro Yacu. Lo primero que se observa en toda la ruta es la presencia de varios fundos con nombres rimbombantes como “Gran Chaparral”, “La Pondorosa”, entre otros.
Un letrero con el nombre de la comunidad Picuro Yacu, da la bienvenida a los que visitan la zona. Al lado derecho se ve mesas que antes habrán servido para ofertar productos alimenticios, aparentemente un mercado. Hoy abandonado.
Al frente un humilde, muy pobre cementerio donde los moradores entierran a sus seres queridos. Una cruz mayor que identifica el espacio. La vía es de tierra arenosa, que también desestabiliza a los vehículos.
Carretera hacia Picuro yacu y otras comunidades, está siendo mejorada con 12 millones de soles.
Un CLAS de salud de Bellavista Nanay, base Picuro, que a las 12 en punto ya está cerrado. Si alguien se enferma, tienen que correr en el día, en horas de la noche o madrugada, hasta Iquitos.
Clas de Picuro Yacu, 12 del día está totalmente cerrado. Cualquier emergencia tienen que salir a Iquitos.
Los colegios se han quedados congelados en la época pasada. Una plaza de tierra donde los niños asisten a jugar en juegos de diversión obsoletos, rotos, sin base donde sentarse y resbalosas de aluminio o fierro recontra calientes por el intenso sol. Un caserío olvidado por donde se le mire.
Hoy existe un problema grande en Picuro Yacu, debido a que un morador, que no es autoridad, viene vendiendo parcelas pegadas al cementerio, por lo que la población se reúne mañana en asamblea a fin de dar a conocer todos los detalles.
Da pena ver a los niños jugar en aparatos obsoletos, que más bien los podrían enfermar.
“Ese hombre ha llegado de la sierra, hasta el momento está vendiendo 3 parcelas del cementerio y ese es un atentado contra nuestros ancestros. No lo vamos a seguir permitiendo por lo que hacemos un llamado a las autoridades a resolver el tema, de lo contrario algo malo puede pasar por este lugar” mencionó uno de los moradores.
Se espera la pronta intervención de la autoridad comunal para que ponga las cosas en su sitio en Picuro Yacu. (LMHL).