*Innumerables denuncias han sido puestas ante la Fiscalía Anticorrupción de Loreto.
La última de la retahíla denuncias interpuestas ante la fiscalía por el mal manejo de los millones que fueron autorizados por la mayoría de integrantes del consejo regional anterior; a fin que se gasten de manera directa en el supuesto objetivo de concluir la obra del nuevo hospital Iquitos, fue en torno a la compra de equipos a la empresa “Cardio Perfusión EIRL”.
Los denunciados son: el ex gobernador de Loreto Elisbán Ochoa Sosa. Francisco Chávez Zegarra, ex jefe de logística y servicios generales. Víctor Torres Hermudez, jefe de asesoría jurídica y los que resulten responsables, por presunta colusión agravada.
Se resume en que el pasado 27 de julio 2022 (cuando todo el mundo andaba en modo Fiestas Patrias), la oficina de logística invitó a la empresa “Cardio Perfusión Eirl”, cuyo gerente es Estremadoyro Ramírez José Roberto, con oficina en la Av. Armendariz 533-Miraflores, para participar en la contratación directa para comprar un Equipo Biomédico para el nuevo hospital Iquitos.
Decenas de millones de soles manejó el ex gobernador de Loreto en adquisiciones directas, ahora denunciadas penalmente.
El 1 de agosto la empresa hizo llegar su propuesta:
-D-72 Video Colonoscopio 699 mil 757 soles. –D-56 Video Broncofibroscopio a 785 mil 080 soles. Y un D-74 Video Gastroscopio a 997 mil 583 soles. Un monto de 2 millones 482 mil soles. Con un plazo de entrega de 24 días calendario.
Al igual que las otras denuncias; lo grave está en que ese grupo de ex funcionarios del gobierno regional de Loreto, basó la adquisición directa bajo la causal de “situación de emergencia”, Incluso señalando que el brote del coronavirus (covid 19) constituye un acontecimiento catastrófico a los efectos de la normativa de Contrataciones del Estado.
Cuando el año 2022, el temido virus ya se había alejado de Loreto luego de dar un latigazo mortal, no solo a los que partieron, sino al corazón de los que quedaron en vida.
Adquisición directa donde ni siquiera la entidad regional sustentaba en sus informes técnicos y legales la necesidad urgente de ejecutar la prestación, por lo que no existía justificación prevista en la normativa para la configuración de una contratación directa bajo la causal de emergencia.
En realidad, un asalto de cuello y corbata, no se puede calificar de otra forma la modalidad cómo han manejado los millones de soles del saldo de obra para terminar la obra tan esperada por la población vulnerable, que es quien por lo general asiste al hospital Iquitos a recuperar su salud. (Luz Marina Herrera Lama).